Oscar Alejandro Balboa Fuentes nos atropelló brutalmente y arrancó
En enero de 2018 FUIMOS BRUTALMENTE ATROPELLADOS EN EL LAGO CALAFQUEN JUNTO A MIS HIJOS
psicópata suelto (la imagen aparece en su facebook)
1) Detalles del brutal atropello:
Contexto de conflicto y amenaza previa:
Hace años tengo problemas con unos matones que forman parte de una
concesionaria en Licán Ray (arriendan motos de agua, etc. con "permiso
de poca importancia sobre sector de playa" otorgado por la marina). El
municipio de Villarrica nos designó para trabajar un espacio municipal
que estos matones ocupaban libremente. Desde el día que los conocimos
tuvimos problemas con ellos por esta causa, lo que se fue agravando
con el paso de los años ya que siempre tienen actitud prepotente con
todo el mundo. A mediados de enero 2018 uno de los empleados de esta
"concesionaria", Manuel, sin mayor provocación, me amenazó diciendo:
"te voy a echar la camioneta encima".
El atropello:
El 21 de enero de 2018, cerca de medio día, paseaba con mis dos hijos
(8 y 4 años) en un bote inflable en el Lago Calafquén, en el sector
playa grande de Licán Ray, cuando OSCAR ALEJANDRO BALBOA FUENTES,
apodado "el tigre", quien pertenece a dicha concesionaria, en clara
imprudencia temeraria, utilizando la moto de agua que conducía como
arma, nos arrojó encima el banano que remolcaba y que se encontraba
lleno de gente, el cual nos embistió brutalmente causándonos grave
daño psicológico a mí y mis hijos, y lesiones leves en mi caso
(adjunto constatación de lesiones) en "lo visible", pero que por
dentro me dejaron "molido" e imposibilitado de realizar mi trabajo
durante casi un mes (pleno "peak" del verano, época en que genero
recursos económicos), lo que me produjo un profundo daño moral y un
consiguiente invierno en extremo díficil.
Ocurrido el atropello el imputado arrancó sin prestarnos auxilio,
tampoco acudió a hacerlo la concesionaria ELSA LEONOR URIBE BAEZA,
apodada "Sra. Pechy", que era la responsable final de lo que ocurriera
con sus vehículos dentro del lago.
Cabe destacar que me fue muy difícil ingresar la denuncia por el
atropello, porque tanto la Marina como Carabineros se negaban
recibirla. Debí acudir personalmente a Panguipulli, a la Capitanía de
Puerto, y si bien la Marina en aquella ocasión recibió la denuncia
escrita que presenté... no la ingresó a la Fiscalía, como procedía,
sino que cerró el caso. Esto provocó nueva amenaza por parte de uno de
los matones de la concesionaria, apodado "Coco" cuando se enteraron
que insistía en denunciar.
Acto seguido, debí acudir personalmente a la Fiscalía de Villarrica a
ingresar la denuncia, esta vez no solo por el atropello sino también
por las amenazas (pero no consideré importante el modo en que fue
ingresada la denuncia -que solo quedó por "lesiones leves"-, ya que al
final fue el argumento que uso el fiscal para cerrar la
investigación). Una vez iniciada la investigación por las lesiones
leves y frente a las diligencias de la PDI, tanto el imputado como la
concesionaria negaron el atropello y ocultaron el contexto de amenaza
y conflicto previo. (cabe destacar que tanto el imputado como la
concesionaria forman parte de un grupo delictual mayor conocido como
"Los Becker", que tienen redes de protección a las que he estado
enfrentando)
Así las cosas, con la firma del fiscal adjunto NESTOR RIQUELME FREDES,
la Fiscalía de Villarrica archivó en dos ocasiones la carpeta.
Solicité entrevista con la abogada asistente CARMEN VALDEBENITO quien
me recibió con mucha prepotencia, a quien solicité personalmente el
desarchivo, aportando nuevos antecedentes y testigos de contexto, y a
quien entregué -en su mano- el documento del 22 de mayo de 2018 (ver mas abajo),
dirigida al mismo fiscal adjunto NESTOR RIQUELME FREDES, en que
solicito la realización de nuevas diligencias y la formalización de la
investigación, además de pedir formalmente defensoría fiscal en lo de
las amenazas y en relación al estado de peligro en que me encuentro
junto a mi familia. Sin embargo, la fiscalía volvió a archivar el
caso.
Solicité entonces entrevista con el Fiscal Jefe de Villarrica, CARLOS
HOFFMANN FLANDES, a quien le planteé mi situación y reiteré lo
solicitado en documento del 22 de mayo de 2018. Sin embargo, sin
acoger mi urgencia de integrar las amenazas y el contexto de conflicto
previo que fundamenta la "imprudencia temeraria" del imputado, rotuló
la causa de simple atropello, y me envió a un callejón sin salida al
mandar el caso al Juez de Garantía con sugerencia de no perseverar en
la investigación, esta vez escondido tras la firma del Fiscal Adjunto
JOSE MANUEL RAMIREZ BERENGUER.
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2) Imputado y concesionaria actuaron como verdaderos psicópatas:
No solo no empatizaron con nosotros que fuimos brutalmente atropellados, ni reconocieron o asumieron su responsabilidad, sino que negaron lo sucedido, buscando culparme. Además, uno de los concesionarios me amenazó por realizar la denuncia, y hoy la Marina de Panguipulli me hostiga exigiendo al Municipio de Villarrica (solo por teléfono al "delegado" en Lican Ray, Maximiliano Fernandez) que no nos den el permiso porque ahora ellos dicen administrar un espacio en que nosotros hemos trabajado durante años, pagando permisos municipales por el uso de aquel espacio público. Esa presión yo creo que la está realizando el Capitán de Puerto de Panguipulli Francisco Arias Larraín, por haberlo denunciado a sus superiores en Valdivia y Valparaíso antes de que muriera la adolescente en el verano de 2018 en la playa grande de Lican Ray. Con total "care palo", ahora dice, en relación a posibles imprudencias en el uso de vehículos acuáticos para este verano 2019: "nosotros vamos a tomar las medidas correspondientes, vamos a hacer las denuncias a la Fiscalía de Panguipulli por Imprudencia Temeraria, lo que está amparado en el Código Penal, porque eso es atentar contra la propia vida como persona. Ante ese tipo de hechos nosotros podemos hacer la denuncia como organismo auxiliar del Ministerio Público”, finalizó Francisco Arias Larraín. Qué cara dura, cuando le pedí subir el caso a la FISCALIA no lo hizo y lo ocultó incluso a la FISCALIA MARITIMA, tergiversando mis dichos... siendo que grabé la audiencia con él, aun así mintió.
Oscar Balboa Fuentes actuó como un verdadero PSICÓPATA , mientras que la señora "Pechy" pasa a ser una psicópata abúlica, por participar del delito de modo involuntario al no prestarnos auxilio, siendo que era su responsabilidad.
Sin embargo, la situación de peligro no ha cesado, al contrario, a principios de
enero de 2019 volveré a toparme con los matones que sin duda estarán mucho mas
enojados conmigo porque he insistido tenazmente en lograr justicia.
Pero como al sur del Bio-bio no hay Estado de Derecho, y Chile es solamente un holograma político por acá, difícilmente lograré que se haga justicia. Pero como dice el antiguo dicho: vox populi vox dei (la voz del pueblo es la voz de Dios), y si no hay justicia hay FUNA!!, dice el pueblo. Así que, al final, la FUNA es la justicia del pueblo!!
En caso de que OSCAR ALEJANDRO BALBOA FUENTES se entregue a la justicia, deja de ser psicópata -ya que asume su responsabilidad- y se acaba la FUNA, por lo que en ese mismo momento yo borraría esta publicación.
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3) Datos del IMPUTADO (nos atropelló en brutal "imprudencia
temeraria", luego ocultó el contexto de conflicto previo y negó el
atropello... el muy psicópata se reía cuando me veía después del atropello)
Nombre: OSCAR ALEJANDRO BALBOA FUENTES
Nacionalidad: chileno
Nacido en: Santiago, el 21 de mayo de 1969
Estado Civil: casado
RUT: 10.835.701-0
Estudios: técnicos
Profesión: vendedor
Domicilio: San Gabriel n° 02110, Temuco
Fono: +56 9 9920 2347
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4) Datos de la concesionaria responsable (no prestó auxilio, evadió
responsabilidad, negó el atropello y ocultó el contexto de conflicto
previo)
Nombre: ELSA LEONOR URIBE BAEZA
Nacionalidad: chilena
Nacida en: Temuco, el 15 de noviembre de 1960
Estado Civil: casada
RUT: 9.368.592-k
Estudios: medios
Profesión: empresaria
Domicilio: Urrutia n°925, Licán Ray, comuna Villarrica
Fono: +56 9 4795 7823
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5) Ministerio Público Fiscalía de Villarrica:
Fiscal Adjunto: NESTOR RIQUELME FREDES (archivó la causa en dos
ocasiones: el 25 de abril de 2018 y el 26 de julio de 2018, no acogió
mi solicitud de formalización de la investigación y de defensoría
frente a situación de peligro que presenté dirigida a él, el día 22 de
mayo de 2018, pero sí mandó que PDI entrevistara a los testigos que
presenté.)
Fiscal Jefe: CARLOS HOFFMANN FLANDES (pedí audiencia con él y me la
dieron para el 24 de octubre de 2018, en persona le manifesté que 1)
no estaba satisfecho con el modo en que la Fiscalía condujo la
investigación, 2) que exigía la formalización de la investigación y 3)
que pedía defensoría de la fiscalía frente a situación de peligro en
que me encuentro con mi familia.)
Fiscal Adjunto: JOSE MANUEL RAMIREZ BERENGUER (envía causa al Juez de
Garantía con decisión de abstenerse de toda investigación el 08 de
noviembre de 2018)
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6) Capitanía de Puerto de Panguipulli:
Capitán de Corbeta LT, FRANCISCO ARIAS LARRAIN (me obstruyó el acceso
a la justicia, tergiversó mis dichos y mintió descaradamente en
proceso de Fiscalía Marina cuando lo denuncié a sus superiores en
Valdivia y Valparaíso)
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DENUNCIA DEL ATROPELLO FRENTE A LA ARMADA:
El 5/2/18, Hans Labra <hanslabra@gmail.com> escribió:
> Para:
>
> Capitán de Navio LT Jorge Imhoff Leyton,
> Gobernador Marítimo de Valparaiso;
>
> Capitán de Fragata LT Sigfrido Ramirez Braun,
> Capitán de Puerto de Valparaiso;
>
> Capitán de Fragata LT Cristian de la Fuente Sanhueza,
> Gobernación Marítima de Valdivia;
>
> Remite:
> Nombre: Hans Cristian Labra Bassa, Artesano
> Rut: 13.266.941-4
> Dirección: Camino Villarrica-Lican Ray Km. 11 s/n., Villarrica.
> e-mail: hanslabra@gmail.com
> fono: +56 9 6517 5141
>
>
>
> Estimados Señores Capitanes,
>
> *Vengo a denunciar un hecho sucedido el pasado 21 de enero* (adjunto
> denuncia formal realizada en Capitanía de Puerto de Panguipulli y
> constatación de lesiones).
>
> Solicito se investigue el caso porque la persona que me atropelló tuvo
> expresa intensión de golpearme causándome lesiones e imposibilidad de
> trabajar por varios días, además, no aparece inscrita como Patrón de Nave
> Menor ni como Patrón Deportivo de Bahía para manejar los vehículos
> acuáticos de la concesión que aparece inscrita a nombre de la Sra. Elsa
> Uribe (apodada Sra. Pechy), que tiene varios vehículos acuáticos (lanchas,
> motos de agua, banano y otros artefactos para transportar pasajeros) y
> quien, según información entregada por funcionaria de Capitanía de Puerto
> de Panguipulli, solo registra un piloto inscrito. Según he podido
> constatar, arriendan sus motos de agua y sacan pasajeros a navegar en sus
> artefactos navales sin contar con las licencias requeridas, realizan
> reparaciones mecánicas de sus motos de agua en la misma playa,
> entorpeciendo el libre tránsito de las personas y contaminando las aguas.
> Además, la Sra. Pechy al parecer le "comparte" de modo irregular su
> concesión a otros dueños de embarcaciones.
>
> Capitanía de Puerto de Panguipulli recibió mi denuncia, pero pasado el
> tiempo debí solicitar personalmente audiencia con Capitán Francisco Arias
> para agilizar e insistir con mi denuncia, le comenté a él también la
> situación de amenazas previas y posteriores al incidente que recibí por
> parte de esta misma gente, y se comprometió a aumentar la fiscalización en
> la zona ¿?. La persona que me atropelló continúa llevando pasajeros a
> diario y la concesión continúa operando irregularmente.
>
> *Solicito se investigue el hecho y se haga justicia, y que se suspenda
> definitivamente concesión de quienes no respetan la ley ni la vida de las
> personas.*
>
> Esperando pronta respuesta,
> Atentamente
>
> Hans Labra
>
>
>
> ADJUNTO:
> -Denuncia hecha en Capitanía de Puerto de Panguipulli.
> -Constatación de Lesiones CESFAM Lican-Ray,
>
------------------------------
Transparencia Armada de Chile
<noreply@transparencia-armada.
6 de marzo de 2018, 2:39
Responder a: noreply@transparencia-armada.
Para: hanslabra@gmail.com, oirs@transparencia-armada.cl
Información solicitada por OIRS
Tipo de Documento
RUT
Documento
13266941-4
Nombres
Hans
Apellido Paterno
Labra
Apellido Materno
Bassa
Edad
0-14
Sexo
Masculino
Pais
Chile
Region
Región de la Araucanía
Comuna
VILLARRICA
Dirección
Camino Villarrica - Lican Ray km 11 s/n
Nacionalidad
chileno
Telefono
+56965175141
hanslabra@gmail.com
Mensaje
El dia 5 de febrero envié DENUNCIA de atropello en Lago Calafquén, a
los señores Capitanes Jorge Imhoff Leyton, Gobernador Marítimo de
Valparaiso; Sigfrido Ramirez Braun, Capitán de Puerto de Valparaiso;
Cristian de la Fuente Sanhueza, Gobernación Marítima de Valdivia; a
los e-mail cpvalparaiso@directemar.cl, cpvaldivia@directemar.cl,
valdivia@directemar.cl; sin recibir respuesta a la fecha. Solicito
iniciar "Sumario Interno" o lo que orresponda, para averiguar estado
de la denuncia. Gracias Este es el texto de la denuncia realizada: El
5/2/18, Hans Labra escribió: > Para: > > Capitán de Navio LT Jorge
Imhoff Leyton, > Gobernador Marítimo de Valparaiso; > > Capitán de
Fragata LT Sigfrido Ramirez Braun, > Capitán de Puerto de Valparaiso;
> > Capitán de Fragata LT Cristian de la Fuente Sanhueza, >
Gobernación Marítima de Valdivia; > > Remite: > Nombre: Hans Cristian
Labra Bassa, Artesano > Rut: 13.266.941-4 > Dirección: Camino
Villarrica-Lican Ray Km. 11 s/n., Villarrica. > e-mail:
hanslabra@gmail.com > fono: +56 9 6517 5141 > > > > Estimados Señores
Capitanes, > > *Vengo a denunciar un hecho sucedido el pasado 21 de
enero* (adjunto > denuncia formal realizada en Capitanía de Puerto de
Panguipulli y > constatación de lesiones). > > Solicito se investigue
el caso porque la persona que me atropelló tuvo > expresa intensión de
golpearme causándome lesiones e imposibilidad de > trabajar por varios
días, además, no aparece inscrita como Patrón de Nave > Menor ni como
Patrón Deportivo de Bahía para manejar los vehículos > acuáticos de la
concesión que aparece inscrita a nombre de la Sra. Elsa > Uribe
(apodada Sra. Pechy), que tiene varios vehículos acuáticos (lanchas, >
motos de agua, banano y otros artefactos para transportar pasajeros) y
> quien, según información entregada por funcionaria de Capitanía de
Puerto > de Panguipulli, solo registra un piloto inscrito. Según he
podido > constatar, arriendan sus motos de agua y sacan pasajeros a
navegar en sus > artefactos navales sin contar con las licencias
requeridas, realizan > reparaciones mecánicas de sus motos de agua en
la misma playa, > entorpeciendo el libre tránsito de las personas y
contaminando las aguas. > Además, la Sra. Pechy al parecer le
"comparte" de modo irregular su > concesión a otros dueños de
embarcaciones. > > Capitanía de Puerto de Panguipulli recibió mi
denuncia, pero pasado el > tiempo debí solicitar personalmente
audiencia con Capitán Francisco Arias > para agilizar e insistir con
mi denuncia, le comenté a él también la > situación de amenazas
previas y posteriores al incidente que recibí por > parte de esta
misma gente, y se comprometió a aumentar la fiscalización en > la zona
¿?. La persona que me atropelló continúa llevando pasajeros a > diario
y la concesión continúa operando irregularmente. > > *Solicito se
investigue el hecho y se haga justicia, y que se suspenda >
definitivamente concesión de quienes no respetan la ley ni la vida de
las > personas.* > > Esperando pronta respuesta, > Atentamente > >
Hans Labra > > > > ADJUNTO: > -Denuncia hecha en Capitanía de Puerto
de Panguipulli. > -Constatación de Lesiones CESFAM Lican-Ray, >
Registro de Consulta
2035
Archivo Adjunto
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2018-03-06T02:39:53-03:00
------------------------------
El 6/3/18, Hans Labra <hanslabra@gmail.com> escribió:
> LICAN RAY, 6 de marzo de 2018
>
>
> Antecedente: Denuncia de atropello en Lago Calafquén.
> Materia: Exige Respuesta.
>
>
> DE: Hans Cristian Labra Bassa, Artesano.
> PARA: Señores Capitanes Jorge Imhoff Leyton, Gobernador Marítimo de
> Valparaiso; Sigfrido Ramirez Braun, Capitán de Puerto de Valparaiso;
> Cristian de la Fuente Sanhueza, Gobernación Marítima de Valdivia;
> presentes,
>
>
> Junto con saludarlos, vengo a manifestarles mi preocupación por no
> recibir respuesta formal de parte de ustedes a la denuncia realizada
> hace ya un mes por este mismo medio.
>
> Considero grave esta situación, siendo que dieron "acuso de recibo" el
> mismo lunes 5 de febrero en que envié dicha denuncia, cuando a media
> tarde se presentó en mi lugar de trabajo -frente a testigos- el Cabo
> Primero Maickel Carrasco, diciendo con tono sarcástico: "¡¿Así que
> andai mandando cartas pa´ todos lados?!". Esto me parece algo muy
> grave, de la mayor seriedad, y que deja ver un actuar poco ético por
> parte de vuestra Institución.
>
> En la denuncia del 5 de febrero, les planteo el compromiso del Capitan
> Francisco Arias, de la Capitanía de Puerto de Panguipulli, de aumentar
> la fiscalización en la zona de la Playa Grande donde fui atropellado
> junto a mis hijos. Sepan que tal "aumento de la fiscalización" nunca
> sucedió, y si acaso aumentó alguna fiscalización fue solamente a los
> vendedores ambulantes que andaban trabajando en la playa, porque en el
> agua no había ley. El tipo que me atropelló siguió manejando sin
> licencia y en total impunidad la moto de agua y tirando pasajeros,
> adultos y niños, imprudentemente por entre los veraneantes que andaban
> navegando en kayaks, bicicletas de agua y tablas, frente a la mirada
> pasiva de los marinos que debían fiscalizarlo y detenerlo. En ese
> mismo lugar, pocos días después, una moto casi aplasta a un niño y su
> madre, quien acudió a denunciar a los marinos apenas aparecieron. Nada
> sucedió. Dias después, en el mismo lugar, sufrió el accidente la niña
> que murió al chocar dos motos de agua en la Playa Grande de Lican Ray.
>
> Me queda la sensación de que la muerte de la niña se hubiera evitado y
> que es responsabilidad de la marina el no haber actuado a tiempo.
> Sepan que el Capitan Francisco Arias desestimó mi denuncia y que por
> eso me atreví a escribirles a ustedes, por lo que EXIJO RESPUESTA
> FORMAL y saber en que etapa va mi denuncia.
>
> Consideren que solo me he presentado a exigir mis derechos, y a
> llamarles la atención respecto a que en el Lago Calafquén -debido a la
> inoperancia de la marina- se vulneran los derechos de las personas,
> sobre todo lo que señala la Constitución en su Artículo 19, nº 8
> respecto a vivir en un medio ambiente libre de contaminación.
>
>
> Esperando respuesta "formal",
> se despide atentamente,
> Hans Labra Bassa.
>
------------------------------
El 7/3/18, Daniel González Salinas <dgonzalez@dgtm.cl> escribió:
> Señor Hans Labra Bassa.
> Presente.
>
> Por intermedio del presente, me permito informar a usted que atendiendo los
>
> principios descritos en el artículo 4° de la Ley 19.880, y entendiendo que
> los hechos y circunstancias descritas en su denuncia ocurrieron fuera del
> área de responsabilidad jurisdiccional de la Capitanía de Puerto de
> Valparaíso, he redireccionado su correo electrónico al Sr. Capitán de
> Puerto del Lago Panguipulli Capitán de Corbeta Sr. Francisco Arias Larrain,
>
> cuya dirección de correo electrónico adjunto como copia y es la repartición
>
> que tiene jurisdicción sobre la situación descrita por usted en el correo
> electrónico adjunto.
>
> Como no me es posible comunicarme con usted por medio de una nota oficial,
> mucho agradeceré si lo estima necesario, me remita sus datos de contacto de
>
> manera de extender la carta respuesta que este acto administrativo
> requiere.
>
>
> Atentamente,
>
> Daniel González Salinas
> Capitán de Fragata LT
> Capitán de Puerto de Valparaíso
>
------------------------------
El 8/3/18, Katherine Moraga Neira <kmoraga@dgtm.cl> escribió:
> BUENAS TARDES :
>
> POR ORDEN DEL SR. GOBERNADOR MARÍTIMO (S.) CC.LT. SR. RICARDO CÁRCAMO
> PASCUAL
>
> ADJUNTO ENVÍO RESPUESTA A SU CORREO ELECTRÓNICO DE FECHA 06.MARZO.2018,
> QUE DICE RELACIÓN CON ACCIDENTE SUFRIDO EL DÍA 21.ENE EN EL SECTOR PLAYA
> GRANDE DE LICANRAY
>
> ATENTAMENTE
>
> .
>
> Katherine V. Moraga Neira
> Secretaria Protocolar y Relaciones Públicas
> Capitanía de Puerto de Valdivia
> Fono : 63 - 2361304
> E-mail : kmoraga@directemar.cl
>
------------------------------
adjuntar respuesta gobernacion valdivia en PDF
------------------------------
El 12/3/18, Hans Labra <hanslabra@gmail.com> escribió:
> LICAN RAY, 12 de Marzo de 2018.
>
>
>
> Antecedente: Denuncia de atropello en Lago Calafquén.
>
> Materia: Impugna Respuesta de Gobernación Marítima de Valdivia, del día 8
> de marzo de 2018.
>
>
>
> DE: Hans Cristian Labra Bassa, Artesano.
>
> PARA: SR. GOBERNADOR MARÍTIMO (S.) CC.LT. SR. RICARDO CÁRCAMO PASCUAL.
>
>
>
>
> 1. Junto con saludarlo, *agradezco documento enviado el día 8 de Marzo,
> ante mi solicitud de respuesta formal por parte de vuestra Institución. *Al
> leerlo, he quedado conforme en cuanto a que he podido inferir que ustedes
> recibieron mis cartas de denuncia del 5 de Febrero y del 6 de Marzo del
> presente año, y realizaron las indagatorias pertinentes, siendo informados
> de que en efecto yo y mis hijos fuimos agredidos con riesgo de muerte el
> día 21 de enero de 2018, en el sector Playa Grande de Licanray.
>
>
> 2. *Lo que no me ha dejado conforme, sino por el contrario, vengo a
> impugnar, son tres temas delicados *que menciona el documento que me
> afectaron directamente en lo físico, en lo moral y en lo espiritual. Sepa
> que lo que me mueve es el ánimo de justicia, y a pesar de haber sido su
> misma Institución la que entorpeció mi acceso a ella, presiento que,
> llegado el proceso hasta donde está, ustedes mismos sabrán establecerla.
> Así espero. Por lo tanto, no es mi ánimo seguir escalando en su Jerarquía
> Institucional, porque ya de usted recibí formal respuesta y digna atención.
> Gracias por eso.
>
>
> 3. El primero de los temas delicados que vengo a impugnar, es el punto 1.3
> del documento, que dice relación a *que supuestamente comparecí ante
> citación de la Autoridad Marítima Local en el Proceso de Fiscalía Marítima*
> que mi carta del 5 de Febrero generó. Respecto a esto, vengo a indicar lo
> siguiente:
>
>
> - Que, en dos ocasiones intenté hacer denuncia ante la Marina. La primera
> vez, a minutos de sucedido el atropello, no lo conseguí porque me lo
> impidieron los concesionarios. La segunda vez, luego de acudir a
> Carabineros y recibir negativa por parte de ellos por no corresponder a su
> jurisdicción: “-¡Pero yo les estoy pidiendo que suban el caso a la
> Fiscalía, y que ellos decidan!”, les increpé a Carabineros ante la
> negativa: “-La Marina es la encargada se subir la denuncia a la Fiscalía”,
> respondió el oficial. Frente a esto, insistí con los marinos que llegaban a
> caminar por la nueva costanera. “Sólo andamos fiscalizando”, contestó el
> marino en mi segundo intento.
>
>
> - Que, imposibilitado de denunciar ante la Marina en Licanray, me presenté
> nuevamente en Carabineros, ya con constatación de lesiones en mano,
> recibiendo de parte del Oficial de Guardia igual respuesta que el día
> anterior. Frente a ésto, solicité hablar personalmente con Sub Oficial Luis
> Monsalve, Jefe de Retén de Licanray, quien al recibirme me orientó a
> presentar denuncia en Capitanía de Puerto de Panguipulli, comprometiéndose
> a que, de no subir la denuncia a Fiscalía la Marina, lo haría él mismo.
>
>
> - Que, presentada denuncia escrita en Panguipulli el 25 de Enero, recibí
> amenaza de muerte por parte de concesionarios denunciados. Lo que me da a
> entender que ellos fueron -de algún modo- notificados.
>
>
> - Que, ante el temor de que concretaran amenazas y frente a persistente
> hostigamiento de parte de concesionarios denunciados, y según pasaban los
> días desde que presenté mi denuncia escrita y no aparentaba avanzar la
> causa, personalmente solicité por teléfono audiencia con Sr. Capitán de
> Puerto de Panguipulli.
>
>
> - Que, al ser recibido por el Sr. Capitán Francisco Arias el día 31 de
> enero, respetuosamente y con toda buena fe, le solicité formalmente grabar
> la audiencia, a lo que él accedió, estableciendo como única condición que
> lo esperara un momento mientras él también ponía a grabar su propio
> teléfono celular (adjunto archivo de audio de la audiencia).
>
>
> - Que, por lo tanto, *vengo a impugnar la información entregada por Sr.
> Capitán Francisco Arias*, ya que NO FUI CITADO POR EL A COMPARECER EN
> PROCESO DE FISCALIA MARITIMA, SINO QUE TUBE QUE SOLICITAR AUDIENCIA
> PERSONALMENTE. (Lo que queda expresamente esclarecido en los primeros
> segundos de la grabación, donde me presento y expongo mis razones para
> solicitar audiencia.)
>
>
> - Que, por lo tanto, entre los días 25 de Enero, día que presento denuncia
> escrita, y el día 31 de Enero, día que obtengo audiencia con Sr. Capitán de
> Puerto, el hostigamiento de los concesionarios denunciados fue permanente;
> esto me ocasionó fuerte estrés y angustia por el temor a que cumplieran
> amenazas, además de las respectivas complicaciones que toda esta tensión
> ocasionó en el proceso de embarazo de mi mujer, casi empujándola a tener
> parto prematuro de nuestro tercer hijo. (Para que comprenda usted, le
> expondré brevemente el contexto: somos una familia de gestores culturales
> que tenemos un kiosco/escuela en la Playa Grande de Licanray, donde
> realizamos talleres gratuitos y enseñamos técnicas para confeccionar
> artesanías, además de vender las nuestras. Por años hemos desarrollado
> nuestra actividad durante el día, y por las noches hemos pernoctado en el
> mismo kiosco/escuela, transformándolo en kiosco/casa; así logramos cuidar
> la infraestructura y nuestras artesanías, logramos descansar porque nos
> evitamos los cansadores traslados con los niños en plena época de tacos, y
> ahorramos, ya que vivimos a 12 km. del lugar y el gasto diario en traslado
> es bastante. Un día nos atropellan con mis hijos de tres y ocho años, ellos
> resultan ilesos gracias a que los cubrí con mi cuerpo. Pero yo resulté
> seriamente afectado debido a que tengo una lesión crónica en la espalda y
> cuello, justo en la zona que me quemó la cuerda, me golpeó el nudo y me
> aplastó el banano. La primera noche no pude dormir por los fuertes dolores,
> la angustia terrible y la impotencia de que la Marina no recibiera mi
> denuncia. La segunda noche, y sintiendo que los dolores aumentaban, acudí a
> solicitar ayuda al Cesfam de Licanray para poder dormir, fue cuando se
> constataron las lesiones. Pinchazo, y dormí como no logré hacerlo en todo
> el resto del verano. Al otro día comienzo los primeros intentos de subir la
> denuncia a la Fiscalía con constatación de lesiones en mano. Los
> concesionarios denunciados trabajan como a 50 mts. y pasan en sus vehículos
> a menos de diez metros del kiosco/escuela hostigando y derrapando tierra
> incluso cuando atendemos público o realizamos talleres. De hecho, la
> amenaza de muerte que recibí por presentar denuncia escrita en Capitanía de
> Puerto fue en medio de un taller de serigrafía (la testigo que presenté en
> Fiscalía es justamente una de las personas que tomaba el taller). Mi mujer
> no se siente bien, 36 semanas de embarazo y la tensión es extrema, decide
> regresar a la casa con los niños, yo me quedo en el lugar de trabajo.
> Durante el día hostigamiento, y por la noche temor de que llegaran a
> concretar las amenazas. Siento el cuerpo adolorido, como molido por dentro,
> sumado a que no logro dormir por las noches. Además, andar haciendo
> diligencias en micros llenas y tacos interminables, calor y dolor de
> espalda, angustia en el pecho e impotencia en el alma. Suponiendo que el
> Sr. Capitán de Puerto de Panguipulli investigaría y pondría orden en su
> jurisdicción solicité audiencia con él. “Necesito pruebas” me dijo,
> “¡ayúdeme!” (minuto 17:54 del audio adjunto). Le presenté pruebas, y aún
> cuando el Sr. Capitán de Puerto reconoce haber exigido por acto
> administrativo que concesionaria se acercara a dar disculpas y que, como la
> Sra. concesionaria no lo hizo, ello es causal de finiquito de permiso
> (minuto 17:00 del audio adjunto) igual los concesionarios denunciados
> siguieron trabajando y hostigándome. Para juntar más pruebas tomé fotos del
> arreglo de motos y el cargado de combustible irresponsable en la playa, que
> eran causales para que le quitaran la concesión, que era una de mis
> solicitudes, además de mis denuncias de amenaza previa, atropello y amenaza
> de muerte posterior, que necesitaba que la Marina subiera a Fiscalía. El
> hostigamiento no cesó, al contrario, se incrementó. Por las noches intenso
> temor de que fueran a mi domicilio ha dañar a mi familia, o que llegaran a
> hacerme daño al kisco/escuela. Me sentía indefenso y no tenía a quien
> recurrir, porque Carabineros no se mete “en asuntos de la Marina” y la PDI
> mas cercana está en Villarrica.) Comprenderá usted, Sr. Gobernador
> Marítimo, que el malestar corporal y el estrés del que hablo fueron
> intensos.
>
>
> - Que, por lo tanto, mi solicitud de audiencia con Sr. Capitán de Puerto,
> era con expresa intención de lograr, por parte de vuestra Institución,
> auxilio frente a las amenazas, justicia por el criminal atropello y lograr
> que la Fiscalía recibiera mi denuncia. (Todo esto: amenazas previas y
> posteriores, hostigamiento diario y la necesidad de llegar a Fiscalía, lo
> expresé en audiencia, por lo que está contenido en archivo de audio
> adjunto).
>
> 4. Considerando esto último, la segunda información del documento que no me
> ha dejado conforme y que, por lo tanto, vengo a impugnar, es en relación al
> punto 1.4 *donde dice que es el Sr. Capitán de Puerto quien me “plantea la
> posibilidad de hacer denuncia ante Ministerio Público Local”, y que sería
> yo quien desestima hacerlo*. Respecto a esto, vengo a decir:
>
> - Que, me siento violentado por vuestra Institución, no solo por no darme
> auxilio frente a un grupo de “matones” que me agredió y durante todo el
> verano me hostigó y amenazó, vulnerando mis derechos y los de mi familia
> (Derechos Constitucionales que su Institución debía defender y que, en
> vista de ello, acudí formalmente a exigir); sino principalmente por
> tergiversar mis palabras y mi intención, respecto a mi urgencia de subir mi
> denuncia a Fiscalía.
>
>
> - Que, a una semana de acontecida la audiencia con Sr. Capitán de Puerto, y
> en vista que no había aumentado fiscalización a concesionarios (el tipo que
> me atropelló seguía conduciendo sin licencia y con total imprudencia
> llevando pasajeros en el banano entre bañistas y remeros), debí acudir
> personalmente a PDI de Villarrica a realizar denuncia.
>
>
> - Que, PDI Villarrica se negó recibir denuncia al saber que ya había
> denuncia en Capitanía de Puerto de Panguipulli, pero me orientaron a acudir
> personalmente a Fiscalía ha averiguar si la marina subió la denuncia y, en
> caso de haberlo hecho, averiguar en qué etapa estaba el proceso. “De no
> haber subido la denuncia la Marina, vuelva para acá, y nosotros le
> ingresaremos su denuncia”, me dijo el oficial Troncoso, de la PDI de
> Villarrica.
>
>
> - Que, acto seguido, acudí personalmente a Fiscalía Pública de Villarrica y
> comprobé la inexistencia de mi denuncia. Solicité entonces “orientación
> judicial” y me recibió una Sra. Abogada ante quien, finalmente, recién el
> día 5 de Febrero pude realizar la denuncia en la misma Fiscalía.
>
>
> - Que, *la decisión de no subir mi denuncia a Fiscalía **Pública
> Local**, **tomada
> por el** Sr. Capitán de Puerto de Panguipulli, Sr. Capitán Francisco Arias,
> **fue** parcial y arbitraria**.*
>
>
> - Que, luego de denuncia hecha a sus jefes jerárquicos el 5 de Febrero, e*
> iniciado **el proceso de Fiscalía Marítima, **el** Sr. Capitán de Puerto de
> Panguipulli, Sr. Capitán Francisco Arias, **tergiversa** mi declaración*,
> lo que ocasiona un profundo menoscabo a la Honra de vuestra Institución.
>
>
> - Que, saliendo de la Fiscalía en Villarrica y a pesar de haber logrado mi
> propósito de ingresar denuncia, me embargó fuerte angustia e impotencia, y
> que ante la inoperancia y la prevaricación de la Capitanía de Puerto de
> Panguipulli, me inundó la sensación de que debía hacer algo antes de que
> lamentáramos una muerte en el lago para que la Marina actuara. Fue con ese
> sentimiento y no otro, que les escribí a la Capitanía de Puerto y a la
> Gobernación de Valdivia, y a la Gobernación de Valparaiso mi carta-denuncia
> del día 5 de febrero, haciéndoles ver que en el lago Calafquén no había
> ley.
>
>
> -Que, lamentablemente, varios días después de enviar denuncia a Valdivia y
> Valparaiso, murió la niña que chocó en moto de agua en la misma Playa
> Grande de Licanray. Por eso en mi carta-denuncia del 6 de marzo va la
> sensación de que hay responsabilidad de la Marina en no haber evitado
> aquella muerte. Debo reconocer, con honda amargura y huella imborrable en
> mi espíritu, que incluso he llegado a culparme a mí mismo por no haber
> sacudido de forma más enérgica a vuestra Institución. Pero, dígame usted...
> ¿qué más podía hacer? Por esos días mi mujer dio a luz y me dediqué por
> completo a la familia. Pasado un tiempo prudente, envié carta-denuncia del
> 6 de Marzo.
>
>
> 5. El tercer y último punto que vengo a impugnar, es* lo que dijo el Sr.
> Capitán de Puerto de Panguipulli, **el** Sr. Capitán Francisco Arias
> respecto a que lo único que yo necesitaba era que me pagaran los gastos
> médicos del accidente*. Respecto a esto, puedo decir:
>
>
> - Que, en audiencia le solicité al Sr. Capitán de Puerto, Sr. Francisco
> Arias: a) justicia, lo que significa -según yo- que el tipo que nos
> atropelló junto a mis hijos vaya preso o reciba el castigo que su acto
> criminal merece; b) que nunca más vuelva a manejar una moto de agua, lo que
> significa que si no tiene licencia quede registro para que nunca se la den;
> c) que le quiten la concesión a esa gente por su prepotencia en agua y
> tierra, porque constituyen un peligro público; d) que me paguen gastos
> médicos y exámenes, de solicitarlos la Fiscalía.
>
>
> - Que, en mi intento de generar documentación para conseguir que Sr.
> Capitán de Puerto finiquitara permiso de concesión irregular, puse en
> riesgo mi integridad física, sufriendo perjuicio moral, ya que debí
> enfrentar mayor hostigamiento por parte de ellos.
>
>
> - Que, de haberles finiquitado el permiso, el Sr. Capitán de Puerto hubiera
> logrado disminuir considerablemente la dotación de vehículos acuáticos que
> debían ser fiscalizados, ya que los concesionarios denunciados en ocasiones
> llegaban a tener más de seis motos de agua operando para el arriendo por
> parte de turistas, más la que tiraba el banano que me atropelló, más una
> lancha de velocidad que tiraba otro artefacto flotante en que transportaban
> pasajeros. Además, se dedican a la compra, venta y reparación de motos de
> agua, lo que significa que las prueban y transan ahí mismo.
>
>
> - Que, sin ellos, solo quedaban dos concesionarios con motos de agua en el
> Sector Playa Grande, lo que, en la práctica, significaba sólo tres motos de
> agua por fiscalizar. Cabe decir que el mismo 5 de Febrero en que subí mi
> denuncia a Valdivia y Valparaiso, una moto de estos otros dos
> concesionarios casi atropelló a una madre y su hijo, quien acudió a
> denunciar a los marinos momentos antes de que se presentaran en el
> kiosco/escuela a decirme que estaba “mandando cartas para todos lados”. Por
> lo tanto, de haberles finiquitado el permiso, la fiscalización habría sido
> -solamente- sobre tres motos de agua, pudiendo fácilmente evitar la Marina
> el accidente con costo de vida que hoy lamentamos.
>
>
> - Que, visitado por los marinos en aquella ocasión, ante testigos el
> oficial Carrasco intentó que desestimara seguir insistiendo con mi
> denuncia, frente a lo que le aclaré que estaba en mi derecho y que
> solamente buscaba lo justo. Le expliqué que la concesión denunciada
> presentaba, según propia información entregada por Capitanía de Puerto,
> sólo un piloto inscrito (terminada audiencia fuimos personalmente con Sr.
> Capitán de Puerto, Sr. Francisco Arias, a averiguar con su secretaria si
> concesionaria tenía inscrito al piloto de moto que me atropelló, y a la
> fecha de la audiencia 31 de Enero, la concesión aparecía registrando
> solamente un piloto: “un tal Jony Becker”, dijo la secretaria), por lo
> tanto, le dije al oficial Carrasco: “Fiscalíncenlos, porque el tipo que me
> atropelló sigue sacando pasajeros de modo imprudente, sin contar con
> licencia, ¡menos para llevar pasajeros!”, mientras le decía esto, el
> oficial Carrasco saca su teléfono y me muestra, con gesto de triunfo, una
> fotografía tomada a carpeta de concesionarios denunciados en que se veían
> al menos 7 licencias para conducción de motos (dicha fotografía la habría
> tomado él momentos antes, cuando -producto de la denuncia de la madre que
> casi fue atropellada junto a su hijo- se acercó la Marina ha indagar a los
> concesionarios). Observé la fotografía que me presentó con detención, y
> comprobé que entre todas las fotografías de las licencias, no aparecía la
> del tipo que me atropelló, informándoselo de inmediato al oficial Carrasco.
>
>
> - Que, mi intención siempre fue velar por la integridad y la seguridad de
> mi familia y la mía propia, además de velar por la seguridad pública y
> conseguir que Licanray realmente fuera parte de “un paraíso lacustre”. Si
> bien para mi no llegó a transformarse en un infierno, no estoy seguro si
> sucedió igual con la familia que hoy lamenta la pérdida de su hija. Por lo
> tanto, impugno lo dicho por Sr. Capitán de Puerto, Sr. Francisco Arias,
> referente a que únicamente quería pago por gastos médicos.
>
>
> Lamentando profundamente que todo esto sucediera, y que me viera obligado a
> llegar hasta ustedes en busca de justicia, y siempre movido por el ánimo de
> establecer la verdad ante todo, me despido agradeciendo su atención.
>
>
> Hans Cristian Labra Bassa.
>
> Artesano.
>
>
> Licanray, 12 de Marzo de 2018.
>
------------------------------
El 16/3/18, Hans Labra <hanslabra@gmail.com> escribió:
> Estimada Sra. Katherine:
> Le escribo para solicitar RESPUESTA FORMAL a Impugnación enviada el día 12
> de Marzo de 2018, al SR. GOBERNADOR MARÍTIMO (S.) CC.LT <http://cc.lt/>.
> SR. RICARDO CÁRCAMO PASCUAL.
> Agradeciendo su atención y pronta respuesta
> Se despide atte
> Hans Labra B.
>
------------------------------
El 23/3/18, V Diaz U <ofinfopublica.sezona@armada.
> Buenas Tardes SR. LABRA:
>
>
>
> Junto con saludarlo adjunto remito a usted carta N° 12.910/10 de fecha 23
> de marzo, formulada por este mando a su reclamo en OIRS Armada N 008-03
> (2035) de fecha 06 de marzo del presente año.
>
------------------------------
adjuntar carta oirs armada talcahuano
------------------------------
El 26/3/18, Hans Labra <hanslabra@gmail.com> escribió:
> Estimado V Diaz U,
> y quien corresponda
>
> Les reenvío antecedentes del avance del caso en Valdivia, pues veo que no
> comparten información de modo interno. Me da esperanza constatar que mi
> denuncia en OIRS fue recibida.
>
> Reenvío: Impugnación de Respuesta a Gobernación Marítima de Valdivia, hecha
> el pasado 12 de Marzo.
A la fecha no he recibido respuesta.
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------
En Villarrica, a 22 mayo de 2018.
Para: SR. NESTOR RICARDO FREDES,
Fiscal Adjunto, Fiscalía Local de Villarrica
De: Hans C. Labra Bassa,
Artesano, padre de familia,
R.U.C.: n° 1800122886-9
Estimado Fiscal de Villarrica,
- En lo principal, pido a Ud. que no se archive, sino que se prosiga
la presente investigación, a fin de realizar nuevas diligencias;
proporciono antecedentes que dan cuenta de la existencia del delito
por parte del imputado, quien está plenamente identificado,
antecedentes que están contenidos en la carpeta; denuncio obstrucción
de la justicia y encubrimiento, por lo tanto, complicidad de los
testigos, quienes actuaron coludidos para faltar a la verdad,
omitiendo cómo ocurrieron los hechos en forma efectiva, con el objeto
expreso de conseguir evasión de responsabilidad civil de dueña de
concesionaria.
- Por tanto, solicito formalización de la investigación para lograr un
efectivo esclarecimiento de los hechos, que permita garantizar un
total establecimiento de la verdad y de las responsabilidades penales
respectivas.
- Además, vengo a solicitar defensoría por parte de la Fiscalía
Pública para que se cumplan los derechos que establece la Constitución
de Chile en sus diversos Códigos, en cuanto a la protección de mi
integridad y la de mi familia, física y psíquica, al respeto de
nuestra dignidad en nuestra calidad de artesanos, y al ejercicio pleno
de nuestro derecho a un buen vivir, toda vez que atravesamos una seria
situación de peligro, con brutal agresión en medio de un contexto de
amenazas, ocultamiento de verdad y encubrimientos.
- Por todo esto, solicito a Ud. practicar aquellas diligencias de
investigación necesarias para consignar y asegurar todo cuanto
condujere y que resulte indispensable para la realización de pericias
sobre la comprobación de los testimonios entregados por el imputado
BALBOA FUENTES, y los testigos URIBE BAEZA, BALBOA LOPETEGUI Y FLORES
VERA, contenidos en el INFORME POLICIAL Nº 20180192642/01049/ 13001/
02.ABR.018. C/R, por cuanto niegan el hecho y encubren al imputado,
bajo pena de perjurio, dando falso testimonio y entorpeciendo a la
justicia al desfigurar la realidad y culpar a la víctima, por lo que
se hacen cómplices en calidad de co-autores del hecho gravísimo que he
denunciado sufrido junto a mis dos pequeños hijos (de 3 y 8 años).
- Mi solicitud, amparada en mi necesidad de justicia, se funda en
demostrar que contenida en la carpeta y en las propias palabras del
imputado y los testigos se descubre la verdad de que el hecho
efectivamente ocurrió, verdad que defiendo no sólo ante la Justicia
Pública, sino -y con más fuerza y urgencia- frente a mis hijos,
víctimas junto a mí de un brutal y criminal atropello. Mi defensa como
verdad del hecho consumado y sufrido junto a ellos, se transforma en
mi relato en imperiosa urgencia de atención por parte de Ud., toda vez
que concurro a la Fiscalía Pública a solicitar resguardo de nuestros
derechos constitucionales de protección y seguridad. La agresión,
negada y encubierta como probaré, se produce en medio de un contexto
de amenaza y problemas anteriores con un grupo de personas (la
“concesionaria”), del que el imputado y sus testigos forman parte,
contexto que se vio agravado al momento de hacer uso de mi derecho de
presentar denuncia del delito ante la Marina, sufriendo nueva amenaza
y hostigamiento permanente por parte de ellos durante todo el resto de
la temporada (período en que, desde hace años, somos vecinos en la
Playa Grande de Lican Ray).
- Considerando que mi denuncia ante la Marina no prosperó, en la que
exigía justicia ante la brutal agresión y protección ante el contexto
de peligro permanente en que nos encontrábamos con mi familia, dando
cuenta además del caos en que se encontraba el tema de las motos de
agua en la playa frente a nosotros, que significaba una nula
fiscalización, decidí subir mi denuncia personalmente a Fiscalía
Pública de Villarrica, a fin de hacer justicia, y de conseguir
protección y evitar un mal mayor. Paralelo a esto, envié denuncia a la
Armada en Valparaiso y Valdivia, solicitándoles actuar con el fin de
evitar que alguien más resultara lesionado (adjunto correspondencia
sostenida con la Armada respecto a denuncia del 5 de febrero).
- Todo esto da cuenta de un serio problema de inseguridad y desorden
público acontecido durante la temporada de verano en Lican Ray, que
llevó no solo a que junto a mis hijos resultáramos brutalmente
atropellados, sino que dos semanas despues se materializó de modo aún
más brutal cuando se produce la muerte de una adolescente por choque
de dos motos de agua, en el mismo sector de la Playa Grande de Lican
Ray. Por eso, me queda la sensación de que si mi denuncia hubiera sido
acogida como corresponde y sancionado el delito criminal, habría sido
restablecido el orden público, con lo que la muerte de dicha
adolescente pudiera haberse evitado. Solicito si corresponde, adjuntar
esta carpeta como antecedente en la investigación de aquella muerte.
En relación al INFORME POLICIAL resultado de la presente
investigación, vengo a decir:
1. Que, siempre en honor a la verdad, efectivamente comparecí en PDI
Villarrica con fecha 15 de Febrero de 2018, a citación telefónica
hecha por Inspector Sandoval; pero, al llegar, me informaron en
recepción que el Inspector Sandoval no estaba presente y que, de todos
modos, me recibiría el Inspector Troncoso. Por lo tanto, el Inspector
Troncoso me recibió estando él solo y no existe testigo alguno de
nuestra entrevista, a diferencia de lo que señala el INFORME POLICIAL
que sitúa al Inspector Sandoval entrevistándome con el Inspector
Troncoso por testigo.
2. Que, respecto a la declaración en calidad de Testigo de Elsa URIBE
BAEZA, dueña de la concesión y amiga del imputado, debo decir:
2.1. Que, URIBE BAEZA nos perjudica gravemente, a mí y mi familia al
declarar que mi denuncia es falsa, siendo que ella no es testigo
válido del hecho mismo, por cuanto efectivamente siempre está en la
playa y no al interior del lago, y que si bien puede habernos visto
cuando nos alejábamos del área, no pudo ver el momento mismo del
atropello, ya que, al momento de los hechos, el ángulo de visión en
que ella queda desde la playa llena de gente respecto a nosotros, la
moto de agua y el banano, no se lo permitiría. Por lo tanto, considero
que intenta no solo encubrir al imputado, sino que busca eludir su
propia responsabilidad en los hechos. Solicito confirmarla como
testigo válido situándola geográficamente en el contexto del hecho
denunciado, y que se indague respecto si la licencia del imputado (que
aparece en anexo nº 17 del INFORME POLICIAL) permite conducción de
moto con banano y pasajeros, a fin de establecer con claridad la
responsabilidad civil de URIBE BAEZA al facilitarle dicho vehículo en
su calidad de “amigo de la familia”, considerando el grave riesgo que
esto conlleva para la seguridad pública, y el hecho concreto que
significó que al hacerlo resultamos brutalmente atropellados junto a
mis hijos.
2.2. Cabe señalar que URIBE BAEZA mantiene una concesión con la cual
desarrolla una actividad lucrativa, por lo que no puede “facilitar a
un amigo” de modo no lucrativo sus vehículos, y si lo hace, debe
dejar algún tipo de registro para presentar a SII, con el objeto de
comprobar que no está eludiendo impuestos y que su relación con el
imputado no es laboral. Por favor, adjuntar dichos antecedentes a la
carpeta.
2.3. Su testimonio, si bien reconoce contacto de la mano de un
tripulante del banano con el bote, y que -según ella- dicha acción del
tripulante evitó un mal mayor, no explica las lesiones sufridas en mi
espalda por el roce de la cuerda, el golpe del nudo y el atropello del
banano (todas con constatación de lesiones) ni explica el cómo se nos
llenó de agua el bote inflable ¿cuál es la baja velocidad en que pudo
pasar la moto de agua cerca del bote para que, como ella dice, uno de
los tripulantes pudiera “tomar el bote con su mano y movernos para no
ser embestidos”?, ¿de qué modo se nos llenó de agua el bote sino fue
porque el banano, al pasar sobre nosotros y aplastarnos, nos hundió en
el lago?.
2.4. En su testimonio, asegura que en la Marina le señalaron que yo
habría dado “varias versiones distintas”. ¿qué versiones distintas
refiere? y si realmente la Marina le informó esto, ¿quién lo hizo?.
2.5. Respecto a que le andaba sacando fotos a su concesión: es cierto;
y lo hice ante expresa solicitud del Capitán de Puerto de Panguipulli,
Capitán Francisco Arias, quien, en audiencia del 31 de Enero de 2018,
personalmente me solicitó pruebas fotográficas del mal obrar de dicha
concesión a fin de poder quitarles con fundamentos el permiso para
operar. (Adjunto fotografías de: recarga de combustible en sitios no
permitidos sin medidas de protección del personal ni del
medioambiente; reparación mecánica de motos de agua en la playa y
obstrucción del tránsito; conducción irresponsable de vehículos). Cabe
señalar que solicité aquella audiencia con Capitán de Puerto en
Panguipulli, debido a que recién en mi quinto intento logré ingresar
denuncia escrita del atropello, acción que me llevó a recibir nueva
amenaza por parte de los concesionarios (los cuatro intentos
frustrados de denunciar fueron: dos veces con marinos que andaban de
ronda en Lican Ray, y dos veces con Carabineros en el Retén de Lican
Ray, estos últimos no quisieron recibir la denuncia porque dijeron que
era jurisdicción de la Marina).
2.6. Respecto a lo dicho por URIBE BAEZA de que no se enteró de nada
porque yo no reclamé o que no me acerqué a decirles nada, vengo a
decir que, minutos después del atropello y en plena flagrancia,
intenté hacer la denuncia respectiva ante los marinos que estaban en
ese mismo momento de ronda en la Playa Grande de Lican Ray, pero que
no pude hacerlo aquella primera vez, porque el marido de URIBE BAEZA,
Antonio SEPULVEDA HERNANDEZ, intervino no permitiéndome realizar la
denuncia ante el marino Alex MARTINEZ. Por lo tanto, impugno lo dicho
de que yo no reclamé, como también el hecho de que ella no se hubiera
enterado de nada, porque considerando que su marido se presentó frente
a los marinos cuando intentaba hacer la denuncia a pocos minutos de
sucedido el atropello, implica que toda su concesión, toda “su gente”
-como ella les llama- estaban al tanto (incluido Jhonny BECKER HARRIS,
trabajador de la concesión, con quien se toma contacto el 22 de
Febrero 2018 en Lican Ray -según INFORME POLICIAL- que también dice no
haber tomado conocimiento del atropello).
2.7. Considerando esto, se puede entender que todo el grupo
(concesionarios y amigos) realizan una asociación ilícita para
desfigurar la realidad y evadir responsabilidades, estando de un
comienzo voluntariamente puestos de acuerdo y coludidos para faltar a
la verdad, teniendo por tanto conciencia de la ocultación y de su
expreso objetivo de encubrir al imputado y evitar responsabilidades de
concesionaria, toda vez que era ella quien debía asumir cualquier
responsabilidad. Asumieron en grupo la negación del hecho, por lo que
al no acudir a prestar auxilio la concesionaria, siendo que era su
obligación hacerlo, elude el compromiso contraído con la Marina de
velar por la seguridad pública, lo que implica la voluntad maliciosa
de negar y encubrir a fin de ocultar el incumplimiento de una
obligación.
3. Que, respecto a la declaración en calidad de Testigo de Oscar
Andrés BALBOA LOPETEGUI, hijo del imputado, debo decir:
3.1. Solicito se cite a declarar y se consulte a “la polola” su
versión de los hechos, en tenor al momento y el modo en que BALBOA
LOPETEGUI nos habría tomado con sus manos para movernos y evitar pasar
tan cerca nuestro y embestirnos con el banano, además consultarle ¿a
qué distancia del bote inflable pasó la moto de agua?, considerando la
altura a la que quedan sentadas las personas sobre el banano ¿alguien
afirmó a BALBOA LOPETEGUI para evitar que cayera sobre nosotros y nos
aplastara con su cuerpo?.
3.2. Respecto a lo dicho por BALBOA LOPETEGUI de que nosotros
estábamos en lugar no habilitado y que era sector exclusivo de
bananos, vengo a decir que en audiencia del 31 de Enero de 2018, el
Capitán de Puerto de Panguipulli, Capitán Francisco Arias, señaló que
yo no habría cometido infracción alguna, que no hay zonas restringidas
para el público general y que la concesionaria no mantiene petición de
acceso de canalizo para la entrada de embarcaciones, por lo que no
existiría una zona exclusiva de bananos, siendo todas las normas y
precauciones para los concesionarios, por lo que el intento de hacerme
responsable a mí (culpar a la víctima) no corresponde.
3.3. Impugno lo dicho por BALBOA LOPETEGUI en cuanto a que en su
testimonio afirma que, personalmente, nos dijo que nos moviéramos para
no pasar tan cerca nuestro. Esto es falso, ya que lo que él dijo en
aquella oportunidad, gritándoselo a su padre que conducía la moto de
agua al momento que realizó la maniobra criminal denunciada, fue:
“¡¡CUIDADO!! ¿¿QUE HACES?? ¡¡LOS NIÑOS, LOS NIÑOS!!”. Acto seguido y
mientras BALBOA LOPETEGUI le gritaba a su padre, debí proteger a mis
hijos de la cuerda con mi cuerpo, recibiendo el golpe del nudo en la
espalda y siendo enseguida embestidos y aplastados por el banano.
Hundido en el agua nuestro bote por el peso del banano y sus pasajeros
que nos pasaba por encima, se llenó el bote de agua, momento en que
efectivamente él nos sacó de abajo del banano con su mano, salvándonos
por ende y evitando una tragedia mayor. Por eso, y con fuertes
emociones encontradas, le estoy agradecido, por que de no habernos
sacado él de abajo del banano no sería yo quien sostuviera esta causa.
3.4. Respecto a que no pudimos movernos debido a que no portábamos
remos, debo decir que esto es cierto y falso a la vez, cierto porque
de verdad no pudimos movernos y falso porque si llevábamos los remos.
Es importante destacar, en este punto, que BALBOA LOPETEGUI al
confirmar en su testimonio que no pudimos movernos se acerca a
reconocer el hecho del atropello, porque efectivamente no pudimos
movernos ya que todo sucedió muy rápido y a mucha velocidad, y la
maniobra criminal que ejecutó el imputado cambió la dirección y el
trayecto del banano, poniéndonos directamente en situación de ser
atropellados, y sin posibilidad alguna de evitar por parte nuestra la
inercia que llevaba el banano (como también reconoce el otro Testigo
Carlos Emiliano FLORES VERA, quien señala que los del bote “no
pudieron salir de la inercia que llevaba el banano”). Solicito se
realicen las pericias que demuestren la versión entregada por BALBOA
LOPETEGUI. Esto es: pericias que lleven a determinar, considerando la
eventualidad de que el imputado no realizara la maniobra criminal
denunciada sino que siguiera en linea recta ¿puede ponerse el bote por
sí mismo en línea de colisión con el banano, considerando que el bote
iba contra el oleaje de la moto?
3.5. Luego dice que “no tuvieron ningún problema ni altercado, no
pasando a mayores y quedando todo como una anécdota”. Esto es muy
importante, ya que aquí se evidencia, por parte de BALBOA LOPETEGUI,
el reconocimiento de que en el agua sucedió algo que pudo desencadenar
un altercado mayor, es decir, que esperaban de mi parte una reacción
violenta. ¿Podía enojarme yo con ellos si él tuvo la amabilidad -según
su relato- de moverme para no causarnos daño?, ¿o simplemente oculta
la verdad para encubrir a su padre y su amiga?. Me pregunto ¿sucede
alguna vez que la víctima enfrente cara a cara al victimario si no es
que va con expresa intención de cobrar justicia en manos propias
mientras “le hierve la sangre”?, cuando logré poner a salvo a mis
hijos la rabia que sentía en contra del imputado era tan grande, era
tanta la ira que sentía que, ciertamente, podría decir que -a mis 40
años de edad- ha sido la única vez en toda mi vida que realmente he
sentido “hervir” mi sangre. Fue la formación que recibí de mi padre y
mi espíritu de educar bien a mis hijos lo que me contuvo, porque para
mí el ser un buen ejemplo para ellos es lo principal, pero la urgencia
de la justicia (materializada en el “hervor de mi sangre” y en su
propio “cargo de conciencia”) les hacía sentir a ellos que en
cualquier momento se producía un altercado que podía pasar a mayores.
3.6. Impugno lo dicho por BALBOA LOPETEGUI en cuanto a que no hubo
atropello y que nadie nos pasó a llevar, y que tampoco hubieron
amenazas. Respecto a esto, debo decir: Debido a cubrir con mi cuerpo a
mis hijos para evitar que la cuerda los golpeara en el cuello, sufrí
quemaduras por el roce de la cuerda en la espalda, luego -como ya
mencioné- vino el golpe del nudo y la embestida del banano, que me
golpeó y torció el cuerpo, lesiones todas que constaté en CESFAM Lican
Ray y cuyo certificado está contenido en la carpeta. Por lo tanto, lo
dicho por BALBOA LOPETEGUI de que no hubo atropello es falso,
obstruyendo con su testimonio a la justicia y encubriendo al imputado
y a su amiga. Respecto a las amenazas, sí las hubo, y él no es testigo
de ninguna de ellas, no pudiendo negarlas, por cuanto vulnera mi
derecho a ser protegido por el Estado cuando alguien amenaza mi
integridad o la de mi familia. La denuncia de la amenaza previa al
atropello, y de la amenaza posterior debido a la denuncia en Marina de
Panguipulli, están consignadas en INFORME POLICIAL (ver anexo nº2).
3.7. Considerando que el daño se acreditó mediante certificado de
constatación de lesiones, y que en sus declaraciones los testigos
coinciden en señalar que existió contacto físico de BALBOA LOPETEGUI
pasajero del banano con el bote inflable, se comprueba que ocurrieron
los hechos en forma efectiva y que las lesiones constatadas son de
origen del acto.
4. Que, respecto a la declaración en calidad de Testigo de Carlos
Emiliano FLORES VERA, debo decir:
4.1. Es importante el testimonio por cuanto reconoce que estábamos en
la línea de inercia del banano, y que no pudimos movernos por nosotros
mismos para salir de ella.
4.2. Pero, es más importante aún, porque FLORES VERA reconoce que está
al tanto de que anteriormente habíamos tenido un problema con la
concesionaria por la ubicación de nuestro puesto y el estacionamiento
de sus vehículos. Es decir, al reconocer que efectivamente existiría
un problema previo y el conocer más aún el motivo real de dicho
problema, y considerando que es amigo de la concesionaria y el
imputado, se entiende que por ellos se entera de aquel problema,
produciéndose, por lo tanto, dos situaciones. Por un lado, confirma el
contexto de tensión arrastrado del año anterior en que se da la
amenaza previa, confirma la motivación para la intensión del imputado
de causarnos daño con premeditación y alevosía, y confirma el contexto
de tensión y estress que enfrenté por causa de la amenaza posterior a
la denuncia. Por otro lado, al reconocer el problema previo, deja en
evidencia que dicha información es manejada abiertamente por la
concesionaria y sus trabajadores, confirmando con ello que URIBE BAEZA
y BALBOA LOPETEGUI son capaces de mentir en su testimonio, al declarar
que desconocen la existencia de anteriores problemas, buscando con
esto esconder el contexto de la agresión, obstruyendo a la justicia y
encubriendo al imputado, actuando con temerario desprecio de la verdad
al intentar eludir responsabilidades.
4.3. Que la declaración de FLORES VERA se parece demasiado a la de
BALBOA LOPETEGUI, sobre todo cuando mencionan -ambos usando casi las
mismas palabras- que luego del incidente “no hubo problemas ni
altercado, no pasando a mayores y quedando todo como una anécdota”,
también cuando dicen “que es todo cuanto pueden manifestar, recalcando
que no hubo atropello, nadie lo pasó a llevar y tampoco hubo
amenazas”. Los testigos, un familiar directo del imputado y un amigo,
ambos domiciliados en Temuco, son citados a declarar a Villarrica el
mismo día y casi a la misma hora (20 minutos de diferencia) pudiendo
haber viajado juntos desde Temuco, ¿se habrán puesto de acuerdo y
ajustaron su declaración respecto a los hechos, pero no respecto al
contexto de problemas anteriores?
5. Que, respecto a la declaración en calidad de Imputado de Oscar
Alejandro BALBOA FUENTES, debo decir:
5.1. Impugno lo dicho por BALBOA FUENTES, ya que si bien reconoce en
su declaración que yo no pude evitar la “cercanía con el banano”,
teniendo que ayudarnos su hijo, miente descaradamente al decir que
tomó las precauciones de no causar accidentes y que no fuimos
embestidos por el banano ni por la cuerda ni por la moto, porque es un
hecho, una verdad -que, por lo tanto, defenderé siempre- el que fuimos
atropellados por él, y que al vernos, es decir, al producirse el
contacto visual entre ambos, y considerando el contexto de anteriores
problemas con la concesión, en actitud criminal y con alevosía,
maniobró la moto de modo que su maniobra nos causara algún daño, lo
que debido al brusco aumento de velocidad y cambio de dirección que le
imprimió a la moto, generó con la maniobra un tirón del banano que lo
hizo proyectarse con mayor velocidad sobre nosotros y que generó que
su hijo lo amonestara verbalmente cuando le gritó. Dicha maniobra
criminal trazó un nuevo curso para el banano, dejándonos en medio de
su linea de inercia y quedando por ende expuestos a ser golpeados por
la cuerda y siendo embestidos, golpeados, aplastados y hundidos por el
banano. Si puso tanta atención y tomó -como dice- las precauciones de
disminuir la velocidad y respetar la zona de bañistas, llegando con el
puro impulso a la orilla... ¿cómo explica que tuviera que ayudarnos su
hijo a deslizarnos para evitar la cercanía con el banano?
5.2. El contexto de problemas anteriores se da en torno a la
prepotencia constante de los concesionarios, no solo con nosotros
respecto a la ubicación de nuestro kiosco y el estacionamiento de sus
vehículos, como confirma en su declaración FLORES VERA, sino que en
general con los turistas y demás artesanos, boteros y comerciantes
(puedo presentar varios “testigos de contexto” que confirman esta
situación), donde todos coinciden en señalar que “estos tipos se creen
dueños de la playa”. Debido a su permanente prepotencia y su actitud
desafiante cada vez que alguien los encaró, con el tiempo -como todos
frente a un grupo de matones- asumí frente a ellos una actitud pasiva,
con el fin de evitarnos problemas, lo que nos dejó en situación de
aparente indefensión, dándole al imputado el marco de impunidad en que
se sabía sin riesgo de una acción defensiva de mi parte, obrando sobre
seguro de hacernos daños y salir impune. Esta actitud desafiante y
prepotente fue lo que atemorizó a los posibles testigos que pudiera
presentar para corroborar los hechos denunciados, sintiéndose
amedrentándolos y evitando que quisieran testificar en favor mío.
5.3. Que debido a lo dicho en su declaración, me siento violentado y
atropellado nuevamente por BALBOA FUENTES, por cuanto niega los hechos
denunciados, por tanto niega un daño real y concreto que sufrí junto a
mis hijos, propinándome con esto un nuevo daño a mi honra y a la de mi
familia, sobre todo causando un grave daño en mi relación padre-hijo,
por cuanto yo estoy actuando frente a ellos de un modo ejemplificador
al obrar según manda la Ley, evitando el tomar la justicia en manos
propias y enseñándoles un modo concreto y efectivo de ser ciudadanos
conscientes que buscan y saben integrarse a la sociedad. Mi relación
con ellos se ajusta a mi intención de enseñarles que los derechos
existen, pero hay que exigir que se respeten. La Constitución, en su
Artículo 19, asegura a todas las personas: El derecho a la vida y a la
integridad física y psíquica de la persona, y el respeto y protección
a la vida privada y pública y a la honra de la persona y de su
familia. Conforme a esto, defiendo la verdad del hecho consumado del
atropello no solamente ante la Ley (sea la Marina o Fiscalía Pública),
buscando justicia, sino también y primeramente frente a mis hijos,
buscando que ellos comprendan que el actuar con calma a pesar de la
intensidad de las emociones y en ajuste a la ley, paso a paso agotando
instancias legales, va cimentando honradamente el acceso a la
justicia. Es decir, aquí está en juego la educación cívica y moral que
como colectividad -el Ministerio Público, el imputado, sus testigos, y
yo- entregamos entre todos a estos dos niños que miran con atención el
proceso legal que su padre lleva adelante. Mi intención es enseñarles
que la justicia existe, pero que hay que invocarla, buscarla,
exigirla, y el que BALBOA FUENTES y sus testigos digan que lo
denunciado por mí es falso no sólo corrompe mi honra, y de paso la
honra de nuestra familia, sino que también daña el proceso natural de
mis dos hijos de comprender la realidad e integrarse a la sociedad.
Porque la negación del hecho consumado del que ellos también fueron
víctimas, sobre todo por parte de la Justicia al archivar el caso,
produce en ellos un menoscabo estructural en su integridad psíquica,
por cuanto desvirtúa su relación propia y personal con la verdad al
hacerla relativa, y corrompe su relación con la Justicia Pública al no
poder contar con ella como institución, dañando mi propósito formativo
de construirlos como personas integrales y como ciudadanos conscientes
y atentos a la Constitución y las Leyes. Por lo tanto, siento que
BALBOA FUENTES al mentir respecto a los hechos me injuria y perjudica
gravemente, poniendo en riesgo nuevamente la integridad psíquica y
psicológica de mis hijos.
Es todo cuanto puedo decir del INFORME POLICIAL y las declaraciones
del imputado y los testigos. Comprendo que esta situación pone en
dilema salomónico a la Fiscalía o al Juez que tome el caso, por cuanto
pone, por un lado, a un hombre mayor que miente descaradamente para
eludir la responsabilidad de sus acciones, y a un hijo ya adulto que,
al igual que el padre, miente para encubrirlo; y por otro, a un padre
joven que intenta enseñar a sus pequeños hijos el valor de la verdad y
el modo de acceder honestamente a la justicia, cuando son víctimas de
un hecho criminal o cuando deben exigir el respeto de sus derechos.
Esperando consultas, y agradeciendo su atención
se despide
Atte
Hans Cristian Labra Bassa
rut. 13.266.941-4
------------------------------
Para: SR. NESTOR RICARDO FREDES,
Fiscal Adjunto, Fiscalía Local de Villarrica
De: Hans C. Labra Bassa,
Artesano, padre de familia,
R.U.C.: n° 1800122886-9
Estimado Fiscal de Villarrica,
- En lo principal, pido a Ud. que no se archive, sino que se prosiga
la presente investigación, a fin de realizar nuevas diligencias;
proporciono antecedentes que dan cuenta de la existencia del delito
por parte del imputado, quien está plenamente identificado,
antecedentes que están contenidos en la carpeta; denuncio obstrucción
de la justicia y encubrimiento, por lo tanto, complicidad de los
testigos, quienes actuaron coludidos para faltar a la verdad,
omitiendo cómo ocurrieron los hechos en forma efectiva, con el objeto
expreso de conseguir evasión de responsabilidad civil de dueña de
concesionaria.
- Por tanto, solicito formalización de la investigación para lograr un
efectivo esclarecimiento de los hechos, que permita garantizar un
total establecimiento de la verdad y de las responsabilidades penales
respectivas.
- Además, vengo a solicitar defensoría por parte de la Fiscalía
Pública para que se cumplan los derechos que establece la Constitución
de Chile en sus diversos Códigos, en cuanto a la protección de mi
integridad y la de mi familia, física y psíquica, al respeto de
nuestra dignidad en nuestra calidad de artesanos, y al ejercicio pleno
de nuestro derecho a un buen vivir, toda vez que atravesamos una seria
situación de peligro, con brutal agresión en medio de un contexto de
amenazas, ocultamiento de verdad y encubrimientos.
- Por todo esto, solicito a Ud. practicar aquellas diligencias de
investigación necesarias para consignar y asegurar todo cuanto
condujere y que resulte indispensable para la realización de pericias
sobre la comprobación de los testimonios entregados por el imputado
BALBOA FUENTES, y los testigos URIBE BAEZA, BALBOA LOPETEGUI Y FLORES
VERA, contenidos en el INFORME POLICIAL Nº 20180192642/01049/ 13001/
02.ABR.018. C/R, por cuanto niegan el hecho y encubren al imputado,
bajo pena de perjurio, dando falso testimonio y entorpeciendo a la
justicia al desfigurar la realidad y culpar a la víctima, por lo que
se hacen cómplices en calidad de co-autores del hecho gravísimo que he
denunciado sufrido junto a mis dos pequeños hijos (de 3 y 8 años).
- Mi solicitud, amparada en mi necesidad de justicia, se funda en
demostrar que contenida en la carpeta y en las propias palabras del
imputado y los testigos se descubre la verdad de que el hecho
efectivamente ocurrió, verdad que defiendo no sólo ante la Justicia
Pública, sino -y con más fuerza y urgencia- frente a mis hijos,
víctimas junto a mí de un brutal y criminal atropello. Mi defensa como
verdad del hecho consumado y sufrido junto a ellos, se transforma en
mi relato en imperiosa urgencia de atención por parte de Ud., toda vez
que concurro a la Fiscalía Pública a solicitar resguardo de nuestros
derechos constitucionales de protección y seguridad. La agresión,
negada y encubierta como probaré, se produce en medio de un contexto
de amenaza y problemas anteriores con un grupo de personas (la
“concesionaria”), del que el imputado y sus testigos forman parte,
contexto que se vio agravado al momento de hacer uso de mi derecho de
presentar denuncia del delito ante la Marina, sufriendo nueva amenaza
y hostigamiento permanente por parte de ellos durante todo el resto de
la temporada (período en que, desde hace años, somos vecinos en la
Playa Grande de Lican Ray).
- Considerando que mi denuncia ante la Marina no prosperó, en la que
exigía justicia ante la brutal agresión y protección ante el contexto
de peligro permanente en que nos encontrábamos con mi familia, dando
cuenta además del caos en que se encontraba el tema de las motos de
agua en la playa frente a nosotros, que significaba una nula
fiscalización, decidí subir mi denuncia personalmente a Fiscalía
Pública de Villarrica, a fin de hacer justicia, y de conseguir
protección y evitar un mal mayor. Paralelo a esto, envié denuncia a la
Armada en Valparaiso y Valdivia, solicitándoles actuar con el fin de
evitar que alguien más resultara lesionado (adjunto correspondencia
sostenida con la Armada respecto a denuncia del 5 de febrero).
- Todo esto da cuenta de un serio problema de inseguridad y desorden
público acontecido durante la temporada de verano en Lican Ray, que
llevó no solo a que junto a mis hijos resultáramos brutalmente
atropellados, sino que dos semanas despues se materializó de modo aún
más brutal cuando se produce la muerte de una adolescente por choque
de dos motos de agua, en el mismo sector de la Playa Grande de Lican
Ray. Por eso, me queda la sensación de que si mi denuncia hubiera sido
acogida como corresponde y sancionado el delito criminal, habría sido
restablecido el orden público, con lo que la muerte de dicha
adolescente pudiera haberse evitado. Solicito si corresponde, adjuntar
esta carpeta como antecedente en la investigación de aquella muerte.
En relación al INFORME POLICIAL resultado de la presente
investigación, vengo a decir:
1. Que, siempre en honor a la verdad, efectivamente comparecí en PDI
Villarrica con fecha 15 de Febrero de 2018, a citación telefónica
hecha por Inspector Sandoval; pero, al llegar, me informaron en
recepción que el Inspector Sandoval no estaba presente y que, de todos
modos, me recibiría el Inspector Troncoso. Por lo tanto, el Inspector
Troncoso me recibió estando él solo y no existe testigo alguno de
nuestra entrevista, a diferencia de lo que señala el INFORME POLICIAL
que sitúa al Inspector Sandoval entrevistándome con el Inspector
Troncoso por testigo.
2. Que, respecto a la declaración en calidad de Testigo de Elsa URIBE
BAEZA, dueña de la concesión y amiga del imputado, debo decir:
2.1. Que, URIBE BAEZA nos perjudica gravemente, a mí y mi familia al
declarar que mi denuncia es falsa, siendo que ella no es testigo
válido del hecho mismo, por cuanto efectivamente siempre está en la
playa y no al interior del lago, y que si bien puede habernos visto
cuando nos alejábamos del área, no pudo ver el momento mismo del
atropello, ya que, al momento de los hechos, el ángulo de visión en
que ella queda desde la playa llena de gente respecto a nosotros, la
moto de agua y el banano, no se lo permitiría. Por lo tanto, considero
que intenta no solo encubrir al imputado, sino que busca eludir su
propia responsabilidad en los hechos. Solicito confirmarla como
testigo válido situándola geográficamente en el contexto del hecho
denunciado, y que se indague respecto si la licencia del imputado (que
aparece en anexo nº 17 del INFORME POLICIAL) permite conducción de
moto con banano y pasajeros, a fin de establecer con claridad la
responsabilidad civil de URIBE BAEZA al facilitarle dicho vehículo en
su calidad de “amigo de la familia”, considerando el grave riesgo que
esto conlleva para la seguridad pública, y el hecho concreto que
significó que al hacerlo resultamos brutalmente atropellados junto a
mis hijos.
2.2. Cabe señalar que URIBE BAEZA mantiene una concesión con la cual
desarrolla una actividad lucrativa, por lo que no puede “facilitar a
un amigo” de modo no lucrativo sus vehículos, y si lo hace, debe
dejar algún tipo de registro para presentar a SII, con el objeto de
comprobar que no está eludiendo impuestos y que su relación con el
imputado no es laboral. Por favor, adjuntar dichos antecedentes a la
carpeta.
2.3. Su testimonio, si bien reconoce contacto de la mano de un
tripulante del banano con el bote, y que -según ella- dicha acción del
tripulante evitó un mal mayor, no explica las lesiones sufridas en mi
espalda por el roce de la cuerda, el golpe del nudo y el atropello del
banano (todas con constatación de lesiones) ni explica el cómo se nos
llenó de agua el bote inflable ¿cuál es la baja velocidad en que pudo
pasar la moto de agua cerca del bote para que, como ella dice, uno de
los tripulantes pudiera “tomar el bote con su mano y movernos para no
ser embestidos”?, ¿de qué modo se nos llenó de agua el bote sino fue
porque el banano, al pasar sobre nosotros y aplastarnos, nos hundió en
el lago?.
2.4. En su testimonio, asegura que en la Marina le señalaron que yo
habría dado “varias versiones distintas”. ¿qué versiones distintas
refiere? y si realmente la Marina le informó esto, ¿quién lo hizo?.
2.5. Respecto a que le andaba sacando fotos a su concesión: es cierto;
y lo hice ante expresa solicitud del Capitán de Puerto de Panguipulli,
Capitán Francisco Arias, quien, en audiencia del 31 de Enero de 2018,
personalmente me solicitó pruebas fotográficas del mal obrar de dicha
concesión a fin de poder quitarles con fundamentos el permiso para
operar. (Adjunto fotografías de: recarga de combustible en sitios no
permitidos sin medidas de protección del personal ni del
medioambiente; reparación mecánica de motos de agua en la playa y
obstrucción del tránsito; conducción irresponsable de vehículos). Cabe
señalar que solicité aquella audiencia con Capitán de Puerto en
Panguipulli, debido a que recién en mi quinto intento logré ingresar
denuncia escrita del atropello, acción que me llevó a recibir nueva
amenaza por parte de los concesionarios (los cuatro intentos
frustrados de denunciar fueron: dos veces con marinos que andaban de
ronda en Lican Ray, y dos veces con Carabineros en el Retén de Lican
Ray, estos últimos no quisieron recibir la denuncia porque dijeron que
era jurisdicción de la Marina).
2.6. Respecto a lo dicho por URIBE BAEZA de que no se enteró de nada
porque yo no reclamé o que no me acerqué a decirles nada, vengo a
decir que, minutos después del atropello y en plena flagrancia,
intenté hacer la denuncia respectiva ante los marinos que estaban en
ese mismo momento de ronda en la Playa Grande de Lican Ray, pero que
no pude hacerlo aquella primera vez, porque el marido de URIBE BAEZA,
Antonio SEPULVEDA HERNANDEZ, intervino no permitiéndome realizar la
denuncia ante el marino Alex MARTINEZ. Por lo tanto, impugno lo dicho
de que yo no reclamé, como también el hecho de que ella no se hubiera
enterado de nada, porque considerando que su marido se presentó frente
a los marinos cuando intentaba hacer la denuncia a pocos minutos de
sucedido el atropello, implica que toda su concesión, toda “su gente”
-como ella les llama- estaban al tanto (incluido Jhonny BECKER HARRIS,
trabajador de la concesión, con quien se toma contacto el 22 de
Febrero 2018 en Lican Ray -según INFORME POLICIAL- que también dice no
haber tomado conocimiento del atropello).
2.7. Considerando esto, se puede entender que todo el grupo
(concesionarios y amigos) realizan una asociación ilícita para
desfigurar la realidad y evadir responsabilidades, estando de un
comienzo voluntariamente puestos de acuerdo y coludidos para faltar a
la verdad, teniendo por tanto conciencia de la ocultación y de su
expreso objetivo de encubrir al imputado y evitar responsabilidades de
concesionaria, toda vez que era ella quien debía asumir cualquier
responsabilidad. Asumieron en grupo la negación del hecho, por lo que
al no acudir a prestar auxilio la concesionaria, siendo que era su
obligación hacerlo, elude el compromiso contraído con la Marina de
velar por la seguridad pública, lo que implica la voluntad maliciosa
de negar y encubrir a fin de ocultar el incumplimiento de una
obligación.
3. Que, respecto a la declaración en calidad de Testigo de Oscar
Andrés BALBOA LOPETEGUI, hijo del imputado, debo decir:
3.1. Solicito se cite a declarar y se consulte a “la polola” su
versión de los hechos, en tenor al momento y el modo en que BALBOA
LOPETEGUI nos habría tomado con sus manos para movernos y evitar pasar
tan cerca nuestro y embestirnos con el banano, además consultarle ¿a
qué distancia del bote inflable pasó la moto de agua?, considerando la
altura a la que quedan sentadas las personas sobre el banano ¿alguien
afirmó a BALBOA LOPETEGUI para evitar que cayera sobre nosotros y nos
aplastara con su cuerpo?.
3.2. Respecto a lo dicho por BALBOA LOPETEGUI de que nosotros
estábamos en lugar no habilitado y que era sector exclusivo de
bananos, vengo a decir que en audiencia del 31 de Enero de 2018, el
Capitán de Puerto de Panguipulli, Capitán Francisco Arias, señaló que
yo no habría cometido infracción alguna, que no hay zonas restringidas
para el público general y que la concesionaria no mantiene petición de
acceso de canalizo para la entrada de embarcaciones, por lo que no
existiría una zona exclusiva de bananos, siendo todas las normas y
precauciones para los concesionarios, por lo que el intento de hacerme
responsable a mí (culpar a la víctima) no corresponde.
3.3. Impugno lo dicho por BALBOA LOPETEGUI en cuanto a que en su
testimonio afirma que, personalmente, nos dijo que nos moviéramos para
no pasar tan cerca nuestro. Esto es falso, ya que lo que él dijo en
aquella oportunidad, gritándoselo a su padre que conducía la moto de
agua al momento que realizó la maniobra criminal denunciada, fue:
“¡¡CUIDADO!! ¿¿QUE HACES?? ¡¡LOS NIÑOS, LOS NIÑOS!!”. Acto seguido y
mientras BALBOA LOPETEGUI le gritaba a su padre, debí proteger a mis
hijos de la cuerda con mi cuerpo, recibiendo el golpe del nudo en la
espalda y siendo enseguida embestidos y aplastados por el banano.
Hundido en el agua nuestro bote por el peso del banano y sus pasajeros
que nos pasaba por encima, se llenó el bote de agua, momento en que
efectivamente él nos sacó de abajo del banano con su mano, salvándonos
por ende y evitando una tragedia mayor. Por eso, y con fuertes
emociones encontradas, le estoy agradecido, por que de no habernos
sacado él de abajo del banano no sería yo quien sostuviera esta causa.
3.4. Respecto a que no pudimos movernos debido a que no portábamos
remos, debo decir que esto es cierto y falso a la vez, cierto porque
de verdad no pudimos movernos y falso porque si llevábamos los remos.
Es importante destacar, en este punto, que BALBOA LOPETEGUI al
confirmar en su testimonio que no pudimos movernos se acerca a
reconocer el hecho del atropello, porque efectivamente no pudimos
movernos ya que todo sucedió muy rápido y a mucha velocidad, y la
maniobra criminal que ejecutó el imputado cambió la dirección y el
trayecto del banano, poniéndonos directamente en situación de ser
atropellados, y sin posibilidad alguna de evitar por parte nuestra la
inercia que llevaba el banano (como también reconoce el otro Testigo
Carlos Emiliano FLORES VERA, quien señala que los del bote “no
pudieron salir de la inercia que llevaba el banano”). Solicito se
realicen las pericias que demuestren la versión entregada por BALBOA
LOPETEGUI. Esto es: pericias que lleven a determinar, considerando la
eventualidad de que el imputado no realizara la maniobra criminal
denunciada sino que siguiera en linea recta ¿puede ponerse el bote por
sí mismo en línea de colisión con el banano, considerando que el bote
iba contra el oleaje de la moto?
3.5. Luego dice que “no tuvieron ningún problema ni altercado, no
pasando a mayores y quedando todo como una anécdota”. Esto es muy
importante, ya que aquí se evidencia, por parte de BALBOA LOPETEGUI,
el reconocimiento de que en el agua sucedió algo que pudo desencadenar
un altercado mayor, es decir, que esperaban de mi parte una reacción
violenta. ¿Podía enojarme yo con ellos si él tuvo la amabilidad -según
su relato- de moverme para no causarnos daño?, ¿o simplemente oculta
la verdad para encubrir a su padre y su amiga?. Me pregunto ¿sucede
alguna vez que la víctima enfrente cara a cara al victimario si no es
que va con expresa intención de cobrar justicia en manos propias
mientras “le hierve la sangre”?, cuando logré poner a salvo a mis
hijos la rabia que sentía en contra del imputado era tan grande, era
tanta la ira que sentía que, ciertamente, podría decir que -a mis 40
años de edad- ha sido la única vez en toda mi vida que realmente he
sentido “hervir” mi sangre. Fue la formación que recibí de mi padre y
mi espíritu de educar bien a mis hijos lo que me contuvo, porque para
mí el ser un buen ejemplo para ellos es lo principal, pero la urgencia
de la justicia (materializada en el “hervor de mi sangre” y en su
propio “cargo de conciencia”) les hacía sentir a ellos que en
cualquier momento se producía un altercado que podía pasar a mayores.
3.6. Impugno lo dicho por BALBOA LOPETEGUI en cuanto a que no hubo
atropello y que nadie nos pasó a llevar, y que tampoco hubieron
amenazas. Respecto a esto, debo decir: Debido a cubrir con mi cuerpo a
mis hijos para evitar que la cuerda los golpeara en el cuello, sufrí
quemaduras por el roce de la cuerda en la espalda, luego -como ya
mencioné- vino el golpe del nudo y la embestida del banano, que me
golpeó y torció el cuerpo, lesiones todas que constaté en CESFAM Lican
Ray y cuyo certificado está contenido en la carpeta. Por lo tanto, lo
dicho por BALBOA LOPETEGUI de que no hubo atropello es falso,
obstruyendo con su testimonio a la justicia y encubriendo al imputado
y a su amiga. Respecto a las amenazas, sí las hubo, y él no es testigo
de ninguna de ellas, no pudiendo negarlas, por cuanto vulnera mi
derecho a ser protegido por el Estado cuando alguien amenaza mi
integridad o la de mi familia. La denuncia de la amenaza previa al
atropello, y de la amenaza posterior debido a la denuncia en Marina de
Panguipulli, están consignadas en INFORME POLICIAL (ver anexo nº2).
3.7. Considerando que el daño se acreditó mediante certificado de
constatación de lesiones, y que en sus declaraciones los testigos
coinciden en señalar que existió contacto físico de BALBOA LOPETEGUI
pasajero del banano con el bote inflable, se comprueba que ocurrieron
los hechos en forma efectiva y que las lesiones constatadas son de
origen del acto.
4. Que, respecto a la declaración en calidad de Testigo de Carlos
Emiliano FLORES VERA, debo decir:
4.1. Es importante el testimonio por cuanto reconoce que estábamos en
la línea de inercia del banano, y que no pudimos movernos por nosotros
mismos para salir de ella.
4.2. Pero, es más importante aún, porque FLORES VERA reconoce que está
al tanto de que anteriormente habíamos tenido un problema con la
concesionaria por la ubicación de nuestro puesto y el estacionamiento
de sus vehículos. Es decir, al reconocer que efectivamente existiría
un problema previo y el conocer más aún el motivo real de dicho
problema, y considerando que es amigo de la concesionaria y el
imputado, se entiende que por ellos se entera de aquel problema,
produciéndose, por lo tanto, dos situaciones. Por un lado, confirma el
contexto de tensión arrastrado del año anterior en que se da la
amenaza previa, confirma la motivación para la intensión del imputado
de causarnos daño con premeditación y alevosía, y confirma el contexto
de tensión y estress que enfrenté por causa de la amenaza posterior a
la denuncia. Por otro lado, al reconocer el problema previo, deja en
evidencia que dicha información es manejada abiertamente por la
concesionaria y sus trabajadores, confirmando con ello que URIBE BAEZA
y BALBOA LOPETEGUI son capaces de mentir en su testimonio, al declarar
que desconocen la existencia de anteriores problemas, buscando con
esto esconder el contexto de la agresión, obstruyendo a la justicia y
encubriendo al imputado, actuando con temerario desprecio de la verdad
al intentar eludir responsabilidades.
4.3. Que la declaración de FLORES VERA se parece demasiado a la de
BALBOA LOPETEGUI, sobre todo cuando mencionan -ambos usando casi las
mismas palabras- que luego del incidente “no hubo problemas ni
altercado, no pasando a mayores y quedando todo como una anécdota”,
también cuando dicen “que es todo cuanto pueden manifestar, recalcando
que no hubo atropello, nadie lo pasó a llevar y tampoco hubo
amenazas”. Los testigos, un familiar directo del imputado y un amigo,
ambos domiciliados en Temuco, son citados a declarar a Villarrica el
mismo día y casi a la misma hora (20 minutos de diferencia) pudiendo
haber viajado juntos desde Temuco, ¿se habrán puesto de acuerdo y
ajustaron su declaración respecto a los hechos, pero no respecto al
contexto de problemas anteriores?
5. Que, respecto a la declaración en calidad de Imputado de Oscar
Alejandro BALBOA FUENTES, debo decir:
5.1. Impugno lo dicho por BALBOA FUENTES, ya que si bien reconoce en
su declaración que yo no pude evitar la “cercanía con el banano”,
teniendo que ayudarnos su hijo, miente descaradamente al decir que
tomó las precauciones de no causar accidentes y que no fuimos
embestidos por el banano ni por la cuerda ni por la moto, porque es un
hecho, una verdad -que, por lo tanto, defenderé siempre- el que fuimos
atropellados por él, y que al vernos, es decir, al producirse el
contacto visual entre ambos, y considerando el contexto de anteriores
problemas con la concesión, en actitud criminal y con alevosía,
maniobró la moto de modo que su maniobra nos causara algún daño, lo
que debido al brusco aumento de velocidad y cambio de dirección que le
imprimió a la moto, generó con la maniobra un tirón del banano que lo
hizo proyectarse con mayor velocidad sobre nosotros y que generó que
su hijo lo amonestara verbalmente cuando le gritó. Dicha maniobra
criminal trazó un nuevo curso para el banano, dejándonos en medio de
su linea de inercia y quedando por ende expuestos a ser golpeados por
la cuerda y siendo embestidos, golpeados, aplastados y hundidos por el
banano. Si puso tanta atención y tomó -como dice- las precauciones de
disminuir la velocidad y respetar la zona de bañistas, llegando con el
puro impulso a la orilla... ¿cómo explica que tuviera que ayudarnos su
hijo a deslizarnos para evitar la cercanía con el banano?
5.2. El contexto de problemas anteriores se da en torno a la
prepotencia constante de los concesionarios, no solo con nosotros
respecto a la ubicación de nuestro kiosco y el estacionamiento de sus
vehículos, como confirma en su declaración FLORES VERA, sino que en
general con los turistas y demás artesanos, boteros y comerciantes
(puedo presentar varios “testigos de contexto” que confirman esta
situación), donde todos coinciden en señalar que “estos tipos se creen
dueños de la playa”. Debido a su permanente prepotencia y su actitud
desafiante cada vez que alguien los encaró, con el tiempo -como todos
frente a un grupo de matones- asumí frente a ellos una actitud pasiva,
con el fin de evitarnos problemas, lo que nos dejó en situación de
aparente indefensión, dándole al imputado el marco de impunidad en que
se sabía sin riesgo de una acción defensiva de mi parte, obrando sobre
seguro de hacernos daños y salir impune. Esta actitud desafiante y
prepotente fue lo que atemorizó a los posibles testigos que pudiera
presentar para corroborar los hechos denunciados, sintiéndose
amedrentándolos y evitando que quisieran testificar en favor mío.
5.3. Que debido a lo dicho en su declaración, me siento violentado y
atropellado nuevamente por BALBOA FUENTES, por cuanto niega los hechos
denunciados, por tanto niega un daño real y concreto que sufrí junto a
mis hijos, propinándome con esto un nuevo daño a mi honra y a la de mi
familia, sobre todo causando un grave daño en mi relación padre-hijo,
por cuanto yo estoy actuando frente a ellos de un modo ejemplificador
al obrar según manda la Ley, evitando el tomar la justicia en manos
propias y enseñándoles un modo concreto y efectivo de ser ciudadanos
conscientes que buscan y saben integrarse a la sociedad. Mi relación
con ellos se ajusta a mi intención de enseñarles que los derechos
existen, pero hay que exigir que se respeten. La Constitución, en su
Artículo 19, asegura a todas las personas: El derecho a la vida y a la
integridad física y psíquica de la persona, y el respeto y protección
a la vida privada y pública y a la honra de la persona y de su
familia. Conforme a esto, defiendo la verdad del hecho consumado del
atropello no solamente ante la Ley (sea la Marina o Fiscalía Pública),
buscando justicia, sino también y primeramente frente a mis hijos,
buscando que ellos comprendan que el actuar con calma a pesar de la
intensidad de las emociones y en ajuste a la ley, paso a paso agotando
instancias legales, va cimentando honradamente el acceso a la
justicia. Es decir, aquí está en juego la educación cívica y moral que
como colectividad -el Ministerio Público, el imputado, sus testigos, y
yo- entregamos entre todos a estos dos niños que miran con atención el
proceso legal que su padre lleva adelante. Mi intención es enseñarles
que la justicia existe, pero que hay que invocarla, buscarla,
exigirla, y el que BALBOA FUENTES y sus testigos digan que lo
denunciado por mí es falso no sólo corrompe mi honra, y de paso la
honra de nuestra familia, sino que también daña el proceso natural de
mis dos hijos de comprender la realidad e integrarse a la sociedad.
Porque la negación del hecho consumado del que ellos también fueron
víctimas, sobre todo por parte de la Justicia al archivar el caso,
produce en ellos un menoscabo estructural en su integridad psíquica,
por cuanto desvirtúa su relación propia y personal con la verdad al
hacerla relativa, y corrompe su relación con la Justicia Pública al no
poder contar con ella como institución, dañando mi propósito formativo
de construirlos como personas integrales y como ciudadanos conscientes
y atentos a la Constitución y las Leyes. Por lo tanto, siento que
BALBOA FUENTES al mentir respecto a los hechos me injuria y perjudica
gravemente, poniendo en riesgo nuevamente la integridad psíquica y
psicológica de mis hijos.
Es todo cuanto puedo decir del INFORME POLICIAL y las declaraciones
del imputado y los testigos. Comprendo que esta situación pone en
dilema salomónico a la Fiscalía o al Juez que tome el caso, por cuanto
pone, por un lado, a un hombre mayor que miente descaradamente para
eludir la responsabilidad de sus acciones, y a un hijo ya adulto que,
al igual que el padre, miente para encubrirlo; y por otro, a un padre
joven que intenta enseñar a sus pequeños hijos el valor de la verdad y
el modo de acceder honestamente a la justicia, cuando son víctimas de
un hecho criminal o cuando deben exigir el respeto de sus derechos.
Esperando consultas, y agradeciendo su atención
se despide
Atte
Hans Cristian Labra Bassa
rut. 13.266.941-4
------------------------------
Villarrica, 27 de noviembre de 2018
Para: Sr. JULIO LUIS SANDOVAL BERROCAL
Juez de Garantía de Villarrica
presente,
De: Hans Labra Bassa
RUT 13.266.941-4
RUC 1800122886-9
RIT 1702 - 2018
Respetado Sr Juez, junto con saludarlo, RUEGO A UD. reconsiderar su
decisión en mi causa, por cuanto lo denunciado sucede en medio de un
"contexto de amenazas", donde el imputado, quien está plenamente
identificado (OSCAR ALEJANDRO BALBOA FUENTES, RUT: 10.835.701-0)
y es parte de una concesionaria, actúa con "imprudencia
temeraria" utilizando el vehículo acuático como un arma en contra mía
y de mis dos hijos, junto a quienes resultamos brutalmente
atropellados por su imprudencia, causándome lesiones "visibles"
(leves) solo a mi. Cuando realicé la denuncia fuí amenazado y
hostigado por la gente de la concesionaria, encontrándome por ello,
actualmente, en grave situación de peligro junto a mi familia.
Sucede que el Ministerio Público (Fiscalia de Villarrica) no acogió la
solicitud que ingresé de formalización de la investigación y de
realización de nuevas diligencias, tomando el caso como "simple
atropello". En entrevista con Sr. Fiscal Jefe de Villarrica CARLOS
HOFFMAN, se lo hice ver y entendí que al derivar el caso al Juez de
Garantía sería Ud. quien se pronunciaría si acaso "el atropello
premeditado en medio de un contexto de amenaza es delito o no". Pero,
según parece, usted ni se enteró de esta grave situación de peligro en
que me encuentro junto a mi familia.
Adjunto mas abajo la solicitud de formalización de la investigación y
de nuevas diligencias, la presentación de testigos y de nuevos
antecedentes que realicé a la Fiscalía de Villarrica, y que fue
arbitrariamente dejada de lado por ellos.
Agradezco su atención y pronta respuesta,
Atentamente,
Hans C. Labra B.
Para: Sr. JULIO LUIS SANDOVAL BERROCAL
Juez de Garantía de Villarrica
presente,
De: Hans Labra Bassa
RUT 13.266.941-4
RUC 1800122886-9
RIT 1702 - 2018
Respetado Sr Juez, junto con saludarlo, RUEGO A UD. reconsiderar su
decisión en mi causa, por cuanto lo denunciado sucede en medio de un
"contexto de amenazas", donde el imputado, quien está plenamente
identificado (OSCAR ALEJANDRO BALBOA FUENTES, RUT: 10.835.701-0)
y es parte de una concesionaria, actúa con "imprudencia
temeraria" utilizando el vehículo acuático como un arma en contra mía
y de mis dos hijos, junto a quienes resultamos brutalmente
atropellados por su imprudencia, causándome lesiones "visibles"
(leves) solo a mi. Cuando realicé la denuncia fuí amenazado y
hostigado por la gente de la concesionaria, encontrándome por ello,
actualmente, en grave situación de peligro junto a mi familia.
Sucede que el Ministerio Público (Fiscalia de Villarrica) no acogió la
solicitud que ingresé de formalización de la investigación y de
realización de nuevas diligencias, tomando el caso como "simple
atropello". En entrevista con Sr. Fiscal Jefe de Villarrica CARLOS
HOFFMAN, se lo hice ver y entendí que al derivar el caso al Juez de
Garantía sería Ud. quien se pronunciaría si acaso "el atropello
premeditado en medio de un contexto de amenaza es delito o no". Pero,
según parece, usted ni se enteró de esta grave situación de peligro en
que me encuentro junto a mi familia.
Adjunto mas abajo la solicitud de formalización de la investigación y
de nuevas diligencias, la presentación de testigos y de nuevos
antecedentes que realicé a la Fiscalía de Villarrica, y que fue
arbitrariamente dejada de lado por ellos.
Agradezco su atención y pronta respuesta,
Atentamente,
Hans C. Labra B.
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